La experiencia de la tarjeta de embarque en Buenos Aires un desastre hay q hacer todo en mostrador cuando uno ya lo tiene en el celular. En vez de simplificar complican. El servicio de comidas mucho q desear la cena pésima, breakfast no hubo, desayuno malisimo un mini bocadillo asqueroso (literal).
El embarque fue bueno, la comodidad siempre puede mejorar, los espacios de los asientos son justos, la comida mejoro mucho desde 2023, el principal es razonable pero el postre y la ensalada es escaso, el café es escaso.
El abordaje fue extremadamente lento. La silla en económica fue demasiado incomoda. La comida mediocre, nos dieron muchísimo pan para llenarnos, era una hamburguesa y un sandwich muy delgados y sencillos, y ni hablar de las bebidas.
Bajó mucho de nivel y la tripulación fue poco amable
Los niños pequeños deberían estar controlados por sus padres. Es un incordio que tenga que soportar la mala educación de los pequeños.
Que el wifi fuera gratuito para todos los pasajeros así como lo hace klm
Siempre he fidelizado con Iberia, mis ultimas experiencias han sido peor que malas. Aviones sucios, comida insulsa, y como viajo o en business o en turista premium, tripulación que NO te deja dormir, mientras en la “cocina” se cuentan los chimentos del dia!
Tuvimos problemas de embarque. Cuando ya estabamos todos y pasado el horario de embarque se nos informo cambio de avion y puerta. Un desbande total!!! En la pantalla jamas aparecio la nueva puerta
Se anuló enlace a destino sin causa creíble y el último tramo del viaje se hizo en autobús, teniendo contratado avión. Y por lo visto debe de ser algo habitual, según comentaron otros pasajeros. MAL, FRANCAMENTE MUY MAL.
El personal encargado de hacer el check in era muy borde
Es casi una low cost, Además el personal de check in y las oficinas q están en el aeropuerto de Madrid con una atención p MÁS QUE pésima, por un error de sistema al momento del check in on line se nos asignó un par de asientos que luego supe que era salida de emergencia (no te los deja elegir, te los asigna aleatoriamente) y me querían cobrar €230 o los daban de baja, obvio que me negué a pagarlos y “disfrutando” (ya que se reían) de la situacion los dieron de baja y me asignaron fila 55 casi dentro del baño. Son de lo peor. Nunca más
Mas de 1 hora para despachar las maletas, solamente dos puestos para hacer check-in
El vuelo con Air Europa fue en general muy positivo. El embarque fue ordenado y puntual, y la tripulación fue amable y profesional durante todo el trayecto. Los asientos eran cómodos para un vuelo de mediana duración, y me gustó que ofrecieran entretenimiento a bordo. Sin embargo, el servicio de comida podría mejorar, tanto en calidad como en opciones para dietas especiales. También noté que el check-in online no fue tan intuitivo como esperaba. Aun así, volvería a volar con ellos.
Me gustó que se puede subir una pieza pequeña con las cosas personales. El servicio de los asistentes de vuelo fue muy buena. Y los asientos bastante cómodos.
La rapidez del embarque. Nada de problemas por el equipaje de mano. La amplitud del asiento. La puntualidad
El vuelo se inició en Atenas, a la madrugada, la persona de la empresa que realizó el embarque muy mal educada, gritándole a todo el mundo, sin organizar los grupos, etc. Adicionalmente nos hizo facturar dos carry-on que estaban en correctas condiciones para viajar en cabina. De hecho habíamos viajado con Rayanair, Transavía y otros con el mismo equipaje sin inconvenientes. Finalmente ese equipaje no llegó a destino y fue recuperado varios días después. Adicionalmente el personal de cabina poco amable también.
Muy malo confor asiento estrecho y cortos mala comida poco selección de bebidas
Considero que si se debe ofrecer algo con el segundo servicio..no solo café y té sino algo suave para comer...unas galletas o un pan podría ser...
En este vuelo ya hubo comodidad, buena comida, buen entretenimiento y bebidas. Había, además, cosas a la venta, pero no se quedaron solo en vender, sino también hubo cosas buenas free.
Un calor tremendo, todos vestidos con ropa de invierno lo hizo más complicado y aún así no nos dieron ni un vaso de agua. Tanto así, que una muchacha tuvo un desmayo. Eso, además, hizo que saliéramos tarde para tomar las conexiones de cada uno. No había pantallas para el entretenimiento, no hubo entretenimiento.